En la antigüedad china e
hindú, el pigmento fue utilizado como cosmético o colorete.
El libro sagrado hindú Atharva Veda
contiene un capítulo con el título de Laksha (el mismo nombre del
insecto en sánscrito) y da una breve reseña de la laca y del insecto laca, el uso medicinal de la laca y un encanto
- oración dirigida a la
buena crianza de la hembra de este insecto, personificada como una hermosa doncella (Dave, 1950).
En 1709, un jesuita francés de nombre Tachard
envía desde su misión en el sur de la India una memoria sobre la preparación y
el uso de la laca producida por este insecto. En 1781 tenemos el primer estudio
científico por James Kerr, quien le da el nombre a la especie Laccifer lacca
Kerr, insecto que hoy se conoce en la India con ese nombre común de Kerria.
Los estudios de Carter (1861) aportan datos nuevos sobre el insecto y su
historia, además de introducir correcciones sobre escritos anteriores. Otros
autores con notables contribuciones son O’Connor (1874), Comstock (1882), Tozetti (1894), Stebbing (1908)
Maxwell-Lefroy (1909), Misra (1928), Chatterjee (1915).
En la actualidad, la laca de este insecto es una
actividad económica importante en Tailandia e India, donde ocupa una población
agrícola estimada en más de 5 millones de habitantes de regiones pobres y su
producción ha alcanzado más de 40 mil toneladas.
Fuente:
Departamento de Desarrollo Rural,
Hyderabad, India.