Aves y mamíferos del Manu

Introducción

Los bosques, en particular los de América tropical, han cautivado la imaginación de varias generaciones de hombres inquietos y arriesgados. Algunos, expertos investigadores, otros, aventureros incontenibles o apasionados observadores de la flora y fauna. Hoy, este mismo deseo de encuentro con la naturaleza impulsa también al visitante que busca sus propias experiencias.

Entre los muchos lugares que el Perú ofrece, Manu reúne las mejores condiciones para emprender ese «encuentro con la naturaleza». Sus diversos paisajes y climas y su bien ganada reputación de lugar con más alta diversidad biológica en el mundo, lo hacen inmejorable.

Entre las más fascinantes imágenes del Manu están las escenas sobre la cara oriental de la cordillera de los andes. Entre julio y agosto, mirando al este durante el amanecer, las nubes se agitan y revuelven creando caprichosas pinceladas de intenso anaranjado. Un poco más abajo, las montañas se cubren de verdor en los bosques de nubes. Aquí, millones de árboles de ramas y troncos retorcidos quedan ocultos detrás de una neblina tan densa que incluso un londinense los encontraría lúgubres. Las lagunas de selva o «cochas» son dignas de una postal. Los días más despejados, sobre las aguas, el azul del cielo comparte el reflejo de los grandes árboles del bosque amazónico a manera de un gran espejo. ¡Estas son tierras de animales asombrosos, lugares para recorrer a pie y sin prisa!