La escasez de vivienda se convierte en un problema social urgente. La construcción de viviendas de la empresa se menciona ya en 1865 en una solicitud de BASF para una licencia de construcción. Un año después de fundada la empresa, hay cuatro edificios de viviendas en el extremo suroeste de la fábrica; son dormitorios y apartamentos para los trabajadores.

2. La síntesis de la alizarina

Los primeros colorantes procedentes del alquitrán de hulla son decepcionantes, ya que destiñen y no resistentes a la luz; es decir, se desvanecen. El tradicional rubio del tinte natural (rojo Turquía), y el añil, siguen dominando el mercado, pero ya no pueden satisfacer la creciente demanda de la industria textil.

Esto requiere una investigación química intensiva. En 1868, BASF nombra al químico Heinrich Caro su primer jefe de investigación. Trabajará en BASF hasta 1889.¹ Las actividades de investigación tendrán lugar, primero, en un laboratorio en Mannheim. Cuando se vende esta propiedad, la investigación continúa en un laboratorio situado junto a la puerta principal del edificio de Ludwigshafen; ese recinto es el precursor del laboratorio principal de BASF.

En colaboración con los profesores berlineses Carl Graebe y Carl Liebermann, Heinrich Caro sintetiza un tinte natural por primera vez en 1869 : es la alizarina, un tinte rojo derivado de la raíz de la Rubia tinctorum (una planta rubiácea, nativa europea), utilizado principalmente para teñir el algodón; tinte sintético este que se convierte en el primer éxito mundial de la historia de BASF. Le seguirán otros nuevos colorantes como eosina, el rojo real y la auramina.

En 1872 comienza la construcción de la gran colonia Hemshof, un solar de más de 400 viviendas destinadas a que los trabajadores de BASF puedan adquirirlas de forma asequible. Son casas independientes, rodeadas de jardines y que cada una consta de cuatro apartamentos con dos salones, un dormitorio, cocina, dos cuartos en el sótano y jardín. Las casas para supervisores y capataces llevan dos años y medio construidas y cada una cuenta con tres salas, dos dormitorios, una cocina, sótano y jardín. Hacia 1880, se construye en el mismo sitio un nuevo complejo de viviendas para los miembros de la alta dirección de BASF.

BASF también participa en el debate público sobre los asuntos de salud y el bienestar de los trabajadores en la industria. Para proteger a sus trabajadores, se establece un fondo de seguro de médico en 1875, que paga las prestaciones de enfermedad exclusivamente con fondos de la compañía.

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